La verdad es que nunca lo pensé. Siempre he querido ser científica, de una manera o de otra. Y estaba segura de que esforzándome lo necesario para conseguir mi objetivo lo conseguiría.
Creo que no. Soy una persona que vive bastante a corto-medio plazo. Decidí dedicarme a la investigación en el último año de carrera y hasta ahora estoy trabajando mucho en ello para hacerlo lo mejor posible.
Creo que nunca llegué a pensarlo pero posiblemente fuese porque nunca he tenido demasiado claro a qué quería dedicarme. Durante el instituto no tenia ninguna vocación ni un especial interés por ningún trabajo, pero durante la carrera comenzó a interesarme la geomorfología y esto me llevó a ser científico. La verdad es que no me arrepiento de esta decisión.
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